Me llega
por correo electrónico desde Bruselas, donde ejerce como profesor, la sabia
reflexión sobre Sinfonía de Praga de Juan
Horrillo. Aunque en tanto que dice que ha estado bebiendo vino con Meme no sé
si es él quien reflexiona o si acaso es Meme o el vino quien le inspira:
A MODO DE PRELUDIO:
Hace algunos días que he leído la novela Sinfonía de Praga y aún resuenan ECOS en
mi cabeza de la misma.
Vaya por delante que Sinfonía de Praga ha encapsulado mi atención desde el primer
párrafo, quizás porque me ha resultado una novela nueva, más que postmoderna, y
por momentos abrumadora, porque desborda cultura y conocimientos literarios y crítica
poco comunes.
¡Cuánto sabe ese autor narrador, a veces por lo que
dice y otras por lo que no dice pero insinúa o elude cuando lo considera
oportuno! “alusión, elusión, elisión”
(391).
¡Cuánta
teoría de la novela, a veces explícita, otras implícita!
Terminas de leer la novela y te deja sensaciones
diversas y encontradas (sinfonía): deleite porque la historia se lee con
agrado, sorpresa por su construcción, pesadumbre al rememorar una época
terrible, placer por tantas coincidencias personales en la manera de entender
la teoría literaria y la teoría de la recepción en la que fuimos formados en la
Universidad, y por ciertos placeres intelectuales y mundanos.
Me he deleitado con la abundantísima metaliteratura:
Reflexiones sobre el acto de escribir y de leer y sobre todo las referencias
intertextuales que desde el principio he ido anotando. “porque el libro está hecho de signos que hablan de otros signos...”:
ojos
claros, serenos
en tanto
que de rosa y azucena
claros
clarines
fruto de
la vid y del trabajo del hombre
luciente
cristal, gentil cuello
dulce boca
que a gustar convida
qué solos
se quedan los muertos
quién
hubiese tal ventura
gallos al
amanecer
toda la
vida es sueño
hacia el
mar, que es el morir
oro
bruñido al sol
tan
callando
aquellos
ríos caudales
ciega y
alumbra con sus soles bellos
amarrado
al duro banco
entrando
en el jardín de los amores
paraíso
cerrado para muchos, jardines abiertos...
en tierra,
en humo, en polvo, en sombra, en nada
Y seguramente que haciendo una segunda y más sosegada
lectura aparecerían muchas más.
PÁGINAS SUBLIMES:
Toda sinfonía tiene sus momentos estelares.
He encontrado páginas antológicas. Me
parecían solos de un clarinete:
Descripción soberbia en “Mientras sudábamos...” (98-99)
Descripción delicadísima de la secretaria
y el vals (177-178
Página excelsa “Es verdad que el agua siempre está corriendo” (205)
Poética “Florecen las magnolias” (307)
Sugestivo “Cuerpo de mujer” (356)
Fabulosa descripción de Auschwitz y su metáfora del
cartelón Arbeit Macht Frey marcador
de la frontera libertad/esclavitud (394-403)
Magistral “Atracción
por los trenes” (447)
Frente a esta intertextualidad y dando mayor riqueza
tonal al texto aparcen numerosas expresiones familiares y refranes
harina de
otro costal
peor el
remedio
hacer de
las nuestras
con la
mosca detrás
no dar una
al derecho
por un
quítame allá esas pajas
TÉCNICA
CALEIDOSCÓPICA:
Atractiva y bastante novedosa y sorprendente me parece
la estructura POLÍFONICA de la novela. Me ha llamado la atención porque se
aleja de los senderos batidos habituales al integrar elementos heterogéneos,
diferentes mimbres para urdir el ensamblaje de la historia.
Hábilmente el narrador testigo que agarra
frecuentemente al lector (al final de las distintas partes del Diario) para que
le siga en su periplo, de recepción en recepción (principio y fin), de
concierto en concierto, encuentra la pausa para introducirnos en el Diario de
Lieserl (un hallazgo), novela dentro de la novela, o la transcripción del
diálogo con HH, Huberto Heco, Humberto ECO (develador de intrigas, Guillaume de
Baskerville, El nombre de la rosa), o
las notas a pie de página, cual si de una tesis se tratara.
Muy diferentes materiales, amén de la narración de la
historia propiamente dicha, que otorgan al relato la polifonía antes citada,
entrelazándolo con el título al que me referiré más adelante.
Una novela es lo que cuenta y lo que no cuenta pero
presupone. Se percibe enseguida la extraordinaria cantidad de información que
nuestro autor narrador almacena, aunque no cuente, pero que subyace a lo largo
de toda la novela. (No sé si por ejemplo Vargas Llosa invirtió tanto tiempo en
recopilar mil y un detalles para su novela La
Fiesta del Chivo).
POÉTICA:
Mención especial merecen las semillas sembradas aquí y
allá sobre la Teoría de la Novela, la Poética, la Teoría de la recepción, que
dan para una tesis doctoral. Todo ello me ha hecho recordar, recobrando el
tiempo perdido, los libros antológicos que un día sobamos de N. Frey (Anathomy of criticism), Marthe Robert
(sobre todo L'ancien et le nouveau),
G. Lukács (Théorie de la littérature),
Bajtin (Esthetique et théorie du roman),
H. James (El arte de la novela),
Auerbach (Mímesis), E.M Foster (Aspects of the novel), G. Génette (Nouveau discours du récit) o R. Barthes
(Poétique du récit), por nombrar
algunos que me venían a la mente al leer algunos párrafos.
He aquí algunas citas:
-
El mundo de la ficción (113)
-
Teoría de la novela (137-138)
-
Los juegos de perspectiva de la Gitanilla cervantina (157)
-
Diario para narrarse a sí misma (163)
-
Ruptura y transgresión de la poética de la novela (175)
-
Poética. Nota a pie de página (370)
-
Teoría de la recepción 418-419
-
Autoría. Es todo un debate. Interesante (459)
-
Escritura (460)
-
“Mise en
abîme” (461)
-
Showing más que telling (480)
-
Historia y ficción (494)
-
Opera operta (495)
-
Autor (496)
-
Escritura desatada (510)
-
Tiempo de la enunciación y del enunciado (519)
TÍTULO:
Me parece un hallazgo. Apropiadísimo. Metáfora o
metonimia o epítome de la historia.
Tema con distintos ritmos y melodías para crear la
armonía sinfónica.
Siempre he sentido un cierto embrujo en algunos
títulos que son un señuelo para el lector: en mi memoria permanecen “Lo que el viento se llevó”, “Los cipreses creen en Dios”, “La sombra del ciprés es alargada”, “Por quién doblan las campanas”, “Luces de bohemia”, “À la recherche du temps perdu” (más evocador el título en francés).
Y desde ahora “Sinfonía de Praga”.
Títulos que tienen melodía y son imanes.
MÚSICA:
Sin duda uno de los temas más sobresalientes, el lugar
de la música en la historia. Uno de los ejes de la estructura.
Su inscripción en la trama temporal del presente del
narrador y del presente del lector le imprime una estructura y una forma que
desempolva recuerdos en la conciencia de éste último.
Los conocimientos del narrador autor (compositor) son
abrumadores. ¡Qué abanico tan amplio!
La novela parece acabada pero no lo es. ¿Quizás habría
que tirar del hilo de la décima sinfonía inacabada de Malher?
Igual que Malher y su sexta sinfonía “lírica” o “heroica” o “faústica” o “enigmática”, “reflejando la naturaleza o haciendo que la naturaleza hubiera de
reflejar la sinfonía y el arte” (421).
La “sinfonía
lúgubre” llega a su paroxismo en una de las más bellas y sobrecogedoras
páginas del libro (Página 401 “judíos,
muchos judíos...” ya citada).
DIARIO:
Genial esta “trouvaille” para la analepsis de la época
nazi.
Pero el diario de Lieserl es el narrador autor, ¿no? “Diario para narrarme a mí misma” (163). “Realidades y ficciones entretejidas”.
Y el autor “narra
y nos narra, a la vez que se narra a sí mismo” (452).
La página 255 “Café Louvre” me parece ilustrativa. La
descripción de las camareras es “masculina”.
451. “es que
acaso el diario de Lieserl está también alterado y manipulado y no es del todo
fiel al original”. Pero el original es éste, el del autor narrador, ¿no?
PERSONAJES:
Narrador testigo. Personaje rico y poliédrico en
tantas facetas. Vida intensa intelectual y literaria.
De Lieserl ya he dicho algo, aunque con un análisis
pormenonizado del Diario se podría decir muchísimo más.
Meme es intrigante y al final se esclarecen muchas
cosas.
Pero me gusta el personaje literario por cuanto es
misterioso y sobre todo sirve de argamasa a la historia.
Pero también ahí aparece el Autor narrador dios todo
poderoso.
“No se debe
seguir la pista de Meme sino de Lieserl” (462)-
“Y así y aquí
acaba la historia de Lieserl, o de Meme —mi historia, tu historia—queridísimo
y desocupado lector” (521).
¿Meme, Lieserl = Autor, narrador?
Pero acaso el principal personaje sea PRAGA. Praga,
personaje (170).
CRONOTOPO:
Interesantísima me ha resultado esa unión inseparable
entre la Praga milenaria y mágica con el tiempo que les tocó vivir al narrador,
a Lieserl y a Meme.
Al tiempo del personaje narrador se une el reencuentro
del tiempo milenario de Praga
Pormenorizadamente aparece el tiempo del primero. Así
sabemos que la historia comienza el martes, 8 de septiembre de 2009, a las 18 horas,
en el Instituto Cervantes de Praga, y se cierra el 12 de octubre de 2012 ,a las
12 horas, en la Embajada de España, si bien se cita una fecha posterior, el 14,
haciendo referencia a una noticia del diario Haaretz, y también se nos informa de que la última palabra de la
Historia fue escrita el 8-5-2014 (507).
El tiempo de Praga se halla diseminado en las
numerosas descripciones de la ciudad y en la Praga de los tiempos de los
distintos personajes
Entre el principio y el fin numerosísimas referencias
temporales fechadas (7 del 2009, 10 del 2010, 17 del 2011 y 21 del 2012)( Las
he anotado porque es un vicio el tema del Tiempo).
“Trouvailles”
-
…obsesivamente y obsesiva obsesión del obseso estado
israelí (279)
-
…esperanzada desesperación sin esperanza (398)
A MODO DE CODA:
¡Cuántas cosa en el tintero! Matices sin fin de la
SINFONÍA
Por ello, nada mejor quizás que una conversación con
un Château Giscours, Margaux 1995, o un Châteauneuf du Pape de los que algunos
quedan en la vinoteca de El Escorial. Del Château Ausone del 97 no queda
ninguno. Me los bebí con Meme.
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